¿Ficción o realidad?
Ficción: Las evaluaciones que tengo ahora me dan toda la información que necesito.
Realidad: Las evaluaciones tradicionales tienen sus desventajas. Por ejemplo, las evaluaciones tradicionales por lo general se dan al fin del año escolar, cuando ya es tarde para realizar cambios en la instrucción para mejorar el rendimiento de los estudiantes. Son también típicamente comprehensivas por naturaleza, sin ofrecer detalles específicos sobre las necesidades individuales de los estudiantes. El seguimiento del progreso ofrece información que es rápida, precisa y puede utilizarse para propósitos de ubicación y análisis.