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  • Cómo abordar los comportamientos problemáticos (Parte 2, escuela secundaria): Estrategias conductuales
Reto
Pensamientos Iniciales
Perspectivas y Recursos

¿Qué estrategias pueden aplicar los educadores para prevenir o abordar los comportamientos problemáticos?

  • Página 1: Estrategias para abordar los comportamientos problemáticos
  • Página 2: Elogios ante un comportamiento específico
  • Página 3: Corrección previa
  • Página 4: Supervisión activa
  • Página 5: Solicitudes de alta probabilidad
  • Página 6: Oportunidades para responder
  • Página 7: Posibilidad de elegir
  • Página 8: Refuerzo diferencial de conductas alternativas

Recursos

  • Página 9: Referencias y Recursos Adicionales
  • Página 10: Créditos
Resumen
Evaluación

¿Qué estrategias pueden aplicar los educadores para prevenir o abordar los comportamientos problemáticos?

Página 8: Refuerzo diferencial de conductas alternativas

teacher talking across tableA veces, las estrategias de baja intensidad no son suficientes para prevenir o distender los comportamientos problemáticos de un estudiante. En estos casos, los educadores pueden aplicar una estrategia como el refuerzo diferencial. Aunque las estrategias de refuerzo diferencial requieren más esfuerzo que las estrategias de baja intensidad, son eficaces cuando se utilizan para tratar conductas desafiantes específicas y constantes del estudiante. El refuerzo diferencial consiste en dar, reducir o retener el refuerzo, dependiendo de si el comportamiento es deseable o indeseable.

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Refuerzo

Estrategia utilizada para aumentar los comportamientos positivos. Se hacen comentarios a un estudiante después de un comportamiento deseado o positivo que aumentan la probabilidad de que el estudiante realice este comportamiento en el futuro.

Para su información

Aunque existen varios tipos de refuerzo diferencial, exploraremos el refuerzo diferencial de conductas alternativas (DRA), uno de los tipos más comunes. El DRA refuerza un comportamiento alternativo positivo que sustituya al comportamiento no deseado o problemático. De este modo, aumenta la frecuencia de la conducta deseada, lo que, a su vez, disminuye la de la conducta no deseada:

  • Refuerzo diferencial de otras conductas (DRO) (en inglés)

Aunque existen varios tipos de refuerzo diferencial, exploraremos el refuerzo diferencial de conductas alternativas (DRA), uno de los tipos más comunes. El DRA refuerza un comportamiento alternativo positivo que sustituya al comportamiento no deseado o problemático. De este modo, aumenta la frecuencia de la conducta deseada, lo que, a su vez, disminuye la de la conducta no deseada.

Uso de la estrategia

Para ayudar a los educadores a prevenir o abordar los comportamientos problemáticos, la siguiente tabla describe los pasos para poner en práctica refuerzo diferencial de conductas alternativas y proporciona un ejemplo.

Pasos Descripción Ejemplo
  1. Identificar el comportamiento no deseado.

Definir el comportamiento no deseado o problemático.

El docente identifica los comportamientos problemáticos de un estudiante.

 

Comportamiento: Leoni comienza a tirarse del cabello cuando no sabe cómo completar su tarea de biología durante el tiempo de trabajo independiente.

  1. Determinar la función probable del comportamiento no deseado.

Determinar por qué es más probable que el estudiante esté realizando el comportamiento no deseado (por ejemplo, recibir atención, evitar una actividad).

Función: Evitar actividades difíciles de ciencias.

  1. Identificar un comportamiento alternativo.

Identificar un comportamiento alternativo aceptable por el que el estudiante pueda recibir el mismo refuerzo.

Nota: Asegúrese de que el estudiante posea las habilidades necesarias para realizar el comportamiento alternativo. Si no es así, enséñeselas explícitamente.

Comportamiento alternativo: Poner un signo de interrogación junto al problema (y luego pasar al siguiente problema) cuando necesite ayuda.

  1. Decidir un programa de refuerzos.

Determine cuándo reforzará al estudiante por la conducta deseada. Dependiendo de la naturaleza del comportamiento alternativo, esto puede basarse en cualquiera de los siguientes:

  • Número de veces (por ejemplo, cada vez, cada tres veces)
  • Cantidad de tiempo (por ejemplo, cada dos minutos)

(Más abajo encontrará información sobre cada uno de ellos)

El docente decide reforzar a Leoni cada vez que pone un signo de interrogación junto a un problema durante el tiempo de trabajo independiente.

 

  1. Reforzar el comportamiento alternativo.

Cada vez que el estudiante realice el comportamiento alternativo, siga el programa de refuerzo para reforzar ese comportamiento. Asegúrese también de no reforzar el comportamiento no deseado.

Cada vez que Leoni pone un signo de interrogación junto al problema y no se tira del cabello, la docente le hace discretamente elogios ante un comportamiento específico.

Cuando ponga en práctica esta estrategia, piense en cómo comprobará que el estudiante está realizando la conducta alternativa. Dependiendo de la conducta, utilizará una de las opciones siguientes.

  • Número de veces
    • Utilícelo cuando el comportamiento alternativo sea “contable” o tenga un principio y un final claros (por ejemplo, levantar la mano, pedir un descanso).
    • Haga el refuerzo cuando el estudiante realice la conducta alternativa.
    • Nota: El número de veces que se produce un comportamiento en un periodo de tiempo constante se denomina frecuencia.
  • Cantidad de tiempo
    • Se utiliza cuando el comportamiento alternativo no tiene un principio y un final claros (por ejemplo, participar, utilizar un volumen de voz adecuado).
    • Utilice un temporizador para que le avise a determinados intervalos (por ejemplo, cada 5 minutos). Si el estudiante muestra el comportamiento cuando el cronómetro le avisa, aplíquele el refuerzo.

In addition to the steps listed above, the four actions below can be helpful when implementing this practice.

Recopilar datos.

Antes de aplicar el refuerzo diferencial, recopile datos sobre la conducta no deseada o problemática para determinar la frecuencia con que se produce. Luego, recopile datos después de aplicar la estrategia durante un tiempo (por ejemplo, un par de semanas). Esto puede ayudarle a:

  • Seleccionar un programa de refuerzo: para determinar cuándo reforzará al estudiante por la conducta deseada, es útil saber con qué frecuencia el estudiante realiza la conducta no deseada. Por ejemplo, si observa al estudiante durante 15 minutos y presencia cinco casos de conducta desafiante, sabrá que el estudiante tiene esa conducta aproximadamente cada tres minutos en promedio. Por lo tanto, es posible que desee establecer un programa de refuerzo ligeramente inferior a cada tres minutos (por ejemplo, cada 2 minutos y medio).
  • Evaluar la eficacia de la estrategia: también debe recopilar datos después de aplicar la estrategia durante un tiempo (por ejemplo, un par de semanas). Esto le permitirá comparar la aparición de la conducta antes y después de aplicar la intervención y determinar si la estrategia es eficaz para el estudiante.

Recopilar datos puede resultar difícil para los docentes, sobre todo si intentan hacerlo durante la enseñanza dirigida por el docente a todo el grupo o a pequeños grupos. En tales casos, puede ser útil que otro adulto (por ejemplo, un paraeducador) recopile los datos.

Identificar los refuerzos.

Los educadores deben pensar en utilizar los tres tipos de consecuencias positivas, o reforzadore: : tangibles (por ejemplo, pegatinas, fichas), sociales (por ejemplo, pulgares arriba, elogios verbales) y relacionados con la actividad (por ejemplo, tiempo extra en la computadora, dibujos). Cada estudiante es diferente y el tipo de refuerzo que resultará eficaz puede variar de uno a otro. También pueden cambiar, con el tiempo. Por estas razones, es importante que los docentes hablen con sus estudiantes para conocer mejor sus intereses y preferencias y repitan esta conversación a lo largo del año. Además, los educadores deben intentar vincular explícitamente el reforzador a la función probable del comportamiento. Por ejemplo, si un estudiante realiza una conducta no deseada para llamar la atención (por ejemplo, hacer ruidos durante la enseñanza en grupo), el educador puede utilizar un reforzador social (por ejemplo, elogios ante un comportamiento específico) para que el estudiante reciba atención por la conducta deseada (por ejemplo, escuchar atentamente durante la enseñanza en grupo).

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Consecuencia positiva

Medio por el que los docentes aumentan la probabilidad de que se produzca un comportamiento deseado en el futuro; suele denominarse reforzador.

Reducir gradualmente el refuerzo.

Al principio, refuerce cada vez que se produzca el comportamiento alternativo. A medida que el estudiante tenga éxito, disminuya gradualmente el refuerzo. Por ejemplo, ofrezca un refuerzo cada vez que el estudiante solicite un descanso y, a continuación, empiece a reforzar gradualmente cada dos instancias. O, en el caso de los programas de refuerzo basados en el tiempo, aumente gradualmente el tiempo entre las oportunidades de obtener un refuerzo. Continúe reduciendo el refuerzo con el tiempo hasta que el estudiante realice la conducta deseada sin refuerzo.

Ofrecer oportunidades para recibir comentarios.

Dé a los estudiantes la oportunidad de dar su opinión sobre la estrategia. Algunos pueden tener ideas de comportamientos alternativos que sean apropiados, pero también más atractivos para ellos. Otros pueden necesitar refuerzos más frecuentes (por ejemplo, cada cinco minutos en lugar de cada diez minutos).

Escuche a Johanna Staubitz ofrecer más información sobre el refuerzo diferencial de conductas alternativas (tiempo: 2:49).

Johanna Staubitz, PhD, BCBA-D
Profesora adjunta
Departamento de Educación Especial
Universidad de Vanderbilt

/wp-content/uploads/module_media/bi2_sec_spanish_media/audio/bi2_p08_sec_staubitz.mp3

Ver la transcripción

Transcripción: Johanna Staubitz

Todo lo que significa el refuerzo diferencial es que hay un efecto diferente de un comportamiento en relación con el efecto que produce otro comportamiento. Un comportamiento produce un efecto más inmediato o mayor o mejor.

El refuerzo diferencial de conductas alternativas (DRA) se basa en la idea de que dos o más comportamientos tienen una recompensa diferente. Durante el DRA, un docente reacciona intencionadamente de forma diferente a la conducta más deseable en función de su capacidad para satisfacer la misma necesidad que la conducta indeseable, pero tiene que dar mejores resultados para que pueda sustituir a la conducta menos deseable. Por ejemplo, yo tenía un estudiante que tenía un comportamiento de baja intensidad: dar golpecitos, revolver los papeles. Pero eso podía escalar hasta la agresión física, que era peligrosa. Y esto ocurría cuando yo no estaba disponible para ayudarle a empezar una tarea concreta. Así que le enseñé al estudiante, mediante la explicación y la experiencia directa, que si levantaba la mano o decía “Disculpe”, yo iría inmediatamente a su lado para ayudarle a empezar la tarea. Ahora bien, ningún docente puede hacer eso siempre, ni debería hacerlo, porque, en última instancia, queremos que los estudiantes sean capaces de iniciar el trabajo de forma independiente, necesiten ayuda o no. Sin embargo, era muy importante establecer muy claramente que los comportamientos alternativos funcionaban mejor que las tácticas perturbadoras en las que el estudiante había estado confiando previamente para obtener el apoyo de los docentes. A partir de ahí, podíamos trabajar para desarrollar su tolerancia a los retrasos en la respuesta del docente. Y pudimos hacerlo cambiando sistemáticamente la rapidez o frecuencia con la que respondía cuando levantaba la mano, aumentando gradualmente el retraso. Además, era muy importante que yo fuera transparente con el estudiante sobre lo que estaba haciendo. Y también por qué, en última instancia, le ayudaría a alcanzar sus objetivos. “Voy a empezar a no venir enseguida. Vas a tener que esperar un poco, a ver qué puedes hacer. Y la razón por la que estamos haciendo esto es porque vas a estar más seguro y estar mejor preparado con habilidades para hacer el tipo de trabajo que quieres hacer”.

Además, el uso de este procedimiento de DRA creó espacio para abordar otras habilidades críticas para el estudiante, como la superación de déficits académicos o la iniciación de tareas de forma independiente. Al fin y al cabo, el DRA consiste en desarrollar las habilidades del estudiante. En lugar de tratar simplemente de eliminar un comportamiento difícil, pensamos por qué se produce ese comportamiento difícil, nos preguntamos cuál es la mejor manera de que el estudiante satisfaga su necesidad y nos aseguramos de que tenga muy claro qué puede hacer en su lugar. Todo esto se hace con un plan claro en mente para reducir gradualmente los apoyos y ayudar a los estudiantes a convertirse en los estudiantes más exitosos e independientes que puedan llegar a ser.

La investigación indica

  • El DRA se ha utilizado para disminuir comportamientos problemáticos, como los arrebatos y los ruidos inapropiados, y aumentar las conductas positivas, como pedir un descanso.
    (Flynn & Lo, 2016; LeGray, Dufrene, Sterling-Turner, Olmi, & Bellone, 2010)
  • El DRA ha demostrado ser eficaz para los niños con discapacidades del desarrollo y los niños con desarrollo típico.
    (Muharib, Dowdy, Rajaraman, & Jessel, 2022; Flynn & Lo, 2016; LeGray, Dufrene, Mercer, Olmi, & Sterling, 2013)

educator toolbox

Para asegurarse de utilizar esta estrategia con fidelidad, descargue esta lista de comprobación de la aplicación de DRA.

  • Lista de verificación de fidelidad de la implementación: refuerzo diferencial de conductas alternativas (DRA) (en inglés)

Para ver nuestros Resúmenes informativos IRIS sobre el refuerzo diferencial de conductas alternativas y el refuerzo diferencial de otras conductas, haga clic en cada uno de los títulos siguientes.

  • Resumen informativo de IRIS: refuerzo diferencial de conductas alternativas (DRA) (en inglés)
  • Resumen informativo de IRIS: refuerzo diferencial de otras conductas (DRO) (en inglés)
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